CORDILLERA DE NAHUELBUTA. Chile.
Nuestro recorrido partió desde Arauco , ubicado a unos 70 km al Sur de Concepción. Cruzamos el río Carampagne y tomamos rumbo al Sur con destino a Cañete , para lo que había que recorrer unos 70 km por la ruta 160.
Cañete de La Frontera, fundada por don García
Hurtado de Mendoza en 1558 , actualmente es una comuna de unos 37.000
habitantes.
Cuando llegamos, nos esperaba nuestro guía, Pablo,
quien nos mostraría en un día, todo el encanto de esta zona, para finalmente
terminar en la Piedra del Águila, lugar que había visto varias veces en las
redes sociales y que lo describían como increíble. Cargamos combustible y
partimos. Tomamos la Ruta P-560 y a unos 15 minutos de camino llegamos al
poblado de Cayucupil, zona rural y ganadera, de praderas verdes, aire
tranquilo; cuenta con una variada oferta de turismo rural ya que es la puerta
de entrada a la Cordillera de Nahuelbuta. Nosotros paramos en un almacén a
orilla de la carretera para comprar los últimos antojos antes de continuar
nuestro viaje.
Dejamos atrás las praderas, el camino ahora era
de tierra y la ruta se comenzó a vestir de bosque. Nuestra primera parada fue a
unos 15 minutos del poblado, en la toma de agua del canal de regadío de
Cayucupil, importante obra para el riego y la gestión del agua de agricultura
de la zona. Dejamos la camioneta y caminamos unos 15 minutos por un
sendero rodeado de bosque nativo, donde pudimos ver los primeros copihues
colgando de los árboles y un chucao nos regaló su canto. Ya el paisaje era todo
bosque, el sonido del agua y el canto de las aves nos anunciaba que este sería
un día hermoso.
Nos dimos un tiempo para disfrutar esta primera parada, y seguimos nuestro viaje. Nuestro próximo destino fue en el mirador de Pichinahuel, donde hay 2 totem ceremoniales mapuches y desde donde tenemos la primera vista panorámica de los cerros cubiertos casi totalmente por bosques de araucarias. Es un paisaje sobrecogedor.
La Cordillera de Nahuelbuta, se encuentra en la región de Bío Bío y forma parte de la cordillera de la costa, ubicada entre los ríos Bío Bío e Imperial, por esto, son cerros de no mucha altura y con una vegetación exuberante. Forma parte del Parque Nacional Nahuelbuta. Se pueden ver, además de araucarias, lengas, coigues, robles, ñirres, entre otros. Y al menos en el mes de Mayo, que es cuando nosotros fuimos, toda esta belleza estaba adornada con copihues, la flor nacional de Chile. Esta es una enredadera que se encarama en los árboles, de flor grande, con forma de trompeta, todas las que vimos eran de color rojo, dándole aún mayor encanto al bosque.
Nuestro guía, Pablo Pincheira, “de los Pincheira
de Nahuelbuta” (@nahuelbutaadventure), nacido y criado en la zona, y por esto
muy conocedor de esta cordillera, se desvió un poco de la ruta a la Piedra del
Águila para mostrarnos un bosque de ñirres, que es de los colores de otoño más
lindos que he visto, de pronto, el verde del camino se transformó en amarillos,
anaranjados y ocres, era una sinfonía otoñal. Caminamos un poco para disfrutar
de este lugar tan hermoso y respirar el color de los árboles. Pero había que
continuar el viaje ….
Finalmente, nuestra última parada. Llegamos a un estacionamiento que está a unos 500 mt de la Piedra del Águila. Para mi fue una sorpresa, la verdad, es que no pregunté mucho el recorrido antes de partir, y pensaba que haríamos algo de caminata para llegar a este lugar, había visto en las redes sociales que llegaban y subían a la roca con actitud de haber logrado una difícil meta y hecho un gran esfuerzo, y yo me había preparado psicológicamente para hacer este esfuerzo, pero se puede llegar en vehículo y el estacionamiento está a 500 metros ¡!! Se recomienda el uso de vehículos con tracción ya que por las lluvias y las características del suelo, hay algunos tramos de mayor dificultad, que probablemente un auto liviano no puede pasar. Nosotros éramos 5 personas, mi cuñada, mis 2 hijos adolescentes, el guía y yo. La verdad, es que con mi cuñada agradecimos no haber caminado mas, el día estaba muy, muy helado y nuestro estado físico no era el mejor. Además, siempre hay que dejar algo pendiente para tener que volver, y en este caso, la próxima visita será de trekking ya que hay senderos para ello. El frío, si bien era mucho, no tenía gran importancia en medio de ese paisaje tan sobrecogedor. Los bosques de araucarias tiene algo de magia, árboles milenarios de cortezas cubiertas de musgos y de historia, la historia del mundo que se transmite por su savia y se elevan al cielo como gigantes guardianes de esta región, al sur de este país tan hermoso.
En el estacionamiento, aprovechamos de hacer el
pic-nic y comer los alimentos que llevábamos. Descansamos un poco y partimos a conquistar
nuestro objetivo y “hacer cumbre”. Caminamos por un sendero angosto rodeados de
bosques frondosos, los copihues nos acompañaron al igual que durante todo el
día.
El regreso fue solo con algunas paradas para
fotografiar los copihues a la orilla del camino y algunas fresas. Así fue
nuestra visita a la Cordillera de Nauelbuta, un día intenso lleno de baños de
bosque, aire fresco y naturaleza. Siempre quedan ganas de mas , pero será
inolvidable. Mi hijos estaban felices. Regresamos a Cañete, el recorrido duró
unas 7 horas que pasaron volando.
Pablo nos contó que hay buses directos de
Santiago a Cayucupil, el viaje dura toda la noche, así que si alguien quiere
una arrancadita de fin de semana, es perfectamente posible. 100% recomendable.
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